El agua es un recurso vital que necesitamos todos los seres vivos para sobrevivir, sin embargo, en la actualidad los humanos nos hemos encargado de sobre utilizarla hasta el grado de casi agotarla.

Nos enfrentamos a un fuerte problema de carestía de agua gracias a los malos hábitos, la sobrepoblación y otras causas. Un futuro con agua suficiente para todos los habitantes del mundo cada vez se ve más complicado.

Pero todavía hay un ligera y pequeña esperanza, se trata de un procedimiento que civilizaciones como los Romanos utilizaron por años, se trata de la recolección o captación de agua de lluvia.

Con este sistema se puede lograr un avance importante para que la mayoría de los humanos puedan utilizar este líquido vital. 

¿Pero cómo funciona?  La recolección de agua de lluvia utiliza elementos que tenemos en casa, se trata de los tejados y cubiertas del edificio, el agua se canaliza, filtra y almacena en un depósito para su uso. 

El sistema de captación de agua contempla los siguientes elementos:   

Área de captación

Normalmente se utiliza el tejado y cubiertas, así como cualquier superficie impermeable. No debe contener ningún impermeabilizante que pueda aportar sustancias tóxicas al agua.

Conductos de agua

Se utiliza la inclinación de los techos o una serie de conductos que dirijan el agua captada al depósito.

Filtros

Lo indispensable es eliminar el polvo e impurezas que porte el agua, en el mercado hay sistemas de filtrado que permite la eliminación de impurezas para la potabilización y uso del agua.

Depósitos o aljibes

Son los espacios en los que almacenarás toda el agua recolectada, hay una gran variedad de tamaños y materiales, lo indispensable es que no contamine el agua y permita el uso de esta.

Sistemas de control

En el último paso en el proceso de captación de agua se encuentran los sistemas de control, los cuales gestionan el uso, almacenaje y reserva del líquido vital.


 Con información del Portal de energías renovables